domingo, 29 de julio de 2012

Codo (General)






En anatomía, el codo es la articulación que une el brazo y el antebrazo, conectando la parte distal del húmero con los extremos proximales del cubito y del radio. Está formado por dos articulaciones con ligamentos laterales, anteriores y posteriores, que las estabilizan y refuerzan, y se encuentran recubiertas por una cápsula articular común. El codo es una potente palanca de primer género.






En realidad, en el codo hay tres articulaciones: una articulación entre el húmero y el cúbito; otra, entre el húmero y el radio; y, por último, una tercera articulación entre el radio y el cúbito.

Las tres articulaciones están protegidas por una cápsula articular, recubierta por unos ligamentos eláticos y resistentes, situados a ambos lados del codo.

La unión entre el húmero y el cúbito es una articulación troclear. Como expliqué en posts anteriores, la forma del extremo del húmero es parecida a una silla de montar, en cuya parte central se adapta el extremo del cúbito.







La articulación entre el húmero y el radio y entre el radio y el cúbito nos permite efectuar los movimientos de giro del antebrazo. Es el movimiento que hacemos cuando utilizamos un destornillador o cuando giramos una llave en una cerradura.

Anatomía del Codo

Articulacion del Codo


Articulación húmero-cubital

  • Es una diartrosis del tipo troclear.
  • Permite movimientos de flexión y extensión.
  • Superficies articulares:
  • Húmero: Tróclea humeral y fosa coronoide.
  • Cúbito: Cavidad sigmoidea mayor y olécranon, también conocido como cúbito de hielo




Articulación húmero-radial

  • Es de tipo condilartrosis.
  • Movimientos: Flexión-extensión, rotación, pronosupinación.
  • Superficies articulares:
    • Húmero: Cóndilo del húmero (de forma esférica)
    • Radio: Carilla cóncava del radio.





        

Articulación radio-cubital proximal

  • Es del tipo trocoide.
  • Movimientos: Pronación y supinación del antebrazo (cúbito y radio se cruzan formando una X)
  • Está reforzada por el ligamento anular.
  • Entre las epífisis proximales del cúbito y radio.
  • Superficies articulares:
    • Radio: Cabeza del radio.
    • Cúbito: Cavidad sigmoidea menor.





     MÚSCULOS DEL CODO
  • Músculos de extensión: tríceps braquial, ancóneo.
  • Músculos de flexión: braquial anterior, Braquiorradial (supinador largo) y bíceps braquial.
  • Músculo de supinación: Supinador corto
  • Músculos de pronación: Pronador redondo y Pronador cuadrado



La flexión de codos es un ejercicio físico realizado estando en posición inclinada, recostado hacia abajo, levantando y bajando el cuerpo con los brazos. Está dedicado al desarrollo de los músculos pectorales y los tríceps, con beneficios adicionales para los deltoides, el serrátil anterior y el coracobraquial.
Una variación del ejercicio que reduce su dificultad, consiste en realizarlo contra una pared en lugar del piso. Otro cambio es apoyarse con las rodillas, en lugar de los dedos de los pies.


domingo, 8 de julio de 2012

Epicondilitis o Codo de Tenista

 Esta lesión se está haciendo muy habitual dentro de los practicantes del tenis y en un gran número puede ser, incluso, subclínico, es decir, el jugador puede no sentir dolor, y tener presente la lesión en su brazo. Es común escuchar hablar sobre la lesión popularmente conocida como “Codo de Tenista·” Su nombre original es Epicondilitis, que es una inflamación de los músculos y tendones en la cara lateral externa del codo, que en términos simples son los músculos que elevan la mano. En los jugadores profesionales, se produce mayormente en el movimiento del saque, en la etapa de desaceleración del servicio. Al levantar la bola, se realiza un movimiento amplio del brazo y al llegar abajo tras el golpe, se tiende a frenar el movimiento de la extremidad. En ese momento de “freno” se usan los extensores y se produce una gran tracción de ellos, que a la larga pueden provocar esta lesión. En los jugadores amateurs, en tanto, es muy normal que se de por el golpe de revés, donde se produce una dorso-flexión de la muñeca y al ser repetitivo genera una mayor tracción de los extensores. En ambos casos, si no se realiza una elongación adecuada, comienza poco a poco el proceso de inflamación de los músculos y tendones.




Tratamiento
El daño de la zona afectada se determinará previo a una ecografía, la que confirmará el diagnostico, y nos permitirá conocer el daño estructural y así planificar el tiempo de cicatrización.
En general el tratamiento incluye kinesioterapia, con un trabajo centrado en alongar y fortalecer los músculos flexores y extensores, además de hielo localizado  y uso de antiinflamatorio. En casos más rebeldes como microrotura o calcificaciones, pueden requerir un tratamiento más complejo con ondas de choque, que son “ondas de ultrasonido” de alta frecuencia, que producirán un cicatrización más rápida.
Otra herramienta de tratamiento y que ha dado muy buenos resultados en el tratamiento que desarrollamos en Clínica MEDS, tiene relación con la infiltración de factores de crecimiento, sustancia proteica que se encuentra en las plaquetas y favorece la regeneración de los tejidos, con muy buenos resultados también, en el corte de ligamento cruzado.
Si con los tratamientos anteriormente mencionados no se ha resuelto la lesión en forma adecuada, se pude llegar a la cirugía, pero se da en muy pocos casos.

Prevención
Suele ser muy común que los practicantes del tenis dediquen muy poco tiempo a fortalecer los  músculos extensores y flexores y a realizar un buen trabajo de elongación. De hacerlo permanentemente, estaremos disminuyendo en un gran número la frecuencia de estas lesiones.
En un estudio recientemente hecho a jugadores menores de 18 años en los Estados Unidos, arrojó que existe un significativo desbalance muscular que está contribuyendo a un aumento de la Epicondilitis
Por ello resulta muy importantes fortalecer y alongar los brazos y si se juega más horas de lo habitual, recomendable es colocarse hielo por espacio de 10 minutos.
Tiempo de evolución de la lesión
La evolución de esta lesión es variable y dependerá del grado de alteración estructural que tenga el tendón y eso va a significar desde que no hay prácticamente una alteración, a  un engrosamiento del tendón (tendinosis) hasta microroturas y calsificaciones. Normalmente una epicondilitis que se diagnostique precozmente y esté con poco daño, su tratamiento puede durar unas 4 semanas antes de volver a jugar. Una lesión más severa puede dejarnos fuera de las canchas alrededor de 3 meses.
Causas 
Suele producirse por

  • La fuerza que se imprime a la raqueta de tenis, al golpear la pelota en golpe de revés o saque.
  • Cuando hay debilidad en los músculos del hombro y muñeca.
  • Uso de raquetas cortas, peso, tipo de grip, encordado etc.
  • Uso de pelotas pesadas o mojadas.


BIBLIOGRAFIA: